La directora de arte Angela Kusen vivía con su novio, el diseñador de mobiliario Salvador Gonzalez, en la calle Alfonso Ugarte de Barranco, una zona del barrio llena de vida, que está cerca del mar y de la plaza central. Desde su ventana, solía quedarse mirando un dúplex del edificio que estaba frente al suyo, en el Armando Paredes de Alfonso Ugarte. La ventana de piso a techo con vistas a la calle y una lámpara colgante de láminas de madera atraían sus ojos y su curiosidad. El año pasado, el departamento se puso en venta y Angela supo que era su oportunidad.


La luz, la distribución y el piso de cemento pulido le daban una sensación de loft neoyorquino, sin pretensiones, que la terminaron de encantar. Su idea fue comprar este depa como inversión, para convertirlo en un alojamiento que ya está disponible en AirBnb, pero también para transformarlo en un espacio flexible y una especie de laboratorio creativo.
El espacio está pensado como una extensión de sus proyectos personales: de Ka Concept Store, la tienda donde hace la curaduría de arte, diseño y moda peruana y latinoamericana, y de Kusen Galería, con la que se enfoca en hacer exposiciones con artistas emergentes, contemporáneos y disruptivos. “Quiero activar este depa como un lugar multidisciplinario: que sea un showroom para diseñadores (durante la Semana de la Moda, por ejemplo), un espacio para workshops o un club de lectura e, incluso, como residencia de artistas mientras producen sus obras”, explicó Angela.
Amante del interiorismo, y acompañada por Salvador, director de Greensalt Studio, Angela hizo puntuales renovaciones en el dúplex y planeó la decoración. Tenía claro que quería una estética minimalista con toques de color y materiales contemporáneos, como la madera, el metal, el terrazo y los vidrios con textura. Su objetivo es que se sintiera como un departamento “con buen gusto, moderno, a la altura de cualquier capital del mundo, pero con carácter”, gracias a cada una de las piezas de arte que ella ha incorporado.



Están la zona de lectura y el baño amarillo con una fotografía lúdica de Daniela Muttini, peruana que reside en Madrid. La puerta se pintó de rojo borgoña y se creó una pared con textura gráfica en corales, amarillo y rosado. En el pasadizo, destaca una obra de Fernando Nureña, que muchas veces Angela duda en llevarse a la casa en la que actualmente vive, de tanto que le gusta.
Para la cocina se eligió una combinación de verde y azul. En esta zona destacan algunos de los huacos de Fabiola Gonzales (es una serie de cuatro de la que Angela se enamoró desde que se exhibían en Ka Concept Store) y las cerámicas de Taller Dos Ríos por Aileen Gavonel. En la pared tiene un lienzo de Alejandra Pérez, pintora peruana. A unos pasos, en el comedor, bajo la lámpara de láminas de madera que cuelga del techo alto (la misma que admiraba de lejos y con la que logró quedarse), se luce una mesa amplia, sillas italianas que compró en Lima Modern, y otro par de sillas decorativas de madera creadas por Greensalt Studio.
Las escaleras, pintadas de borgoña, llevan al segundo nivel, donde está el ropero con un sticker plateado, el baño y la habitación donde resalta la banca inspirada en la mítica Locus Solus de Gae Aulenti de los años sesenta, tapizada con una textura de rayas en fucsia, un color que a Angela la remite a la sierra del Perú. También hay un telar de cintura y una alfombra con la frase “Mi vida florece por ti”, ambos hechos en Cajamarca. La cabecera y tarima de la cama, en madera cachimba, tiene formas ovaladas y orgánicas que, para la directora de arte, invitan al descanso, y también fueron creadas por Greensalt Studio.


Ka Apartamento, como lo ha bautizado Angela, se habita entre las reservas de viajeros, la residencia temporal de artistas extranjeros, y como epicentro de talleres de artistas locales. La directora de arte ya está planeando que sea escenario para futuras colaboraciones con arquitectos y cenas privadas. El depa resultó una apuesta por la expansión de la visión de Angela Kusen. Hoy, es un lugar donde se respira creatividad, un espacio donde mucho puede pasar.