Hiroshima y Nagasaki. Desastre total. Pero después de toda destrucción, felizmente, viene una re-construcción. Después de pasar por uno de sus peores momentos, Japón renació. Y se trató no sólo de un renacer económico sino un renacer de las diversas áreas del saber humano, como el diseño y la arquitectura.
El apogeo arquitectónico se llevó a cabo con la construcción del Estadio Olímpico de Tokio en 1958, los edificios diseñados por el arquitecto Kenzo Tange en la década de los 60 y la construcción de autopistas y ferrocarriles efectivamente organizados.
Los japoneses no se quieren olvidar de esto y por eso el Museo Edo-Tokio abre la muestra “Tokyo Olympics and the Bullet Train”, que va hasta el 16 de noviembre. Una exposición que nos lleva a apreciar lo que muchos llamaron el milagro oriental, donde entre otras cosas se muestra la obra de Kenzo Tange.
Kenzo Tange es uno de los responsables de la transformación de la arquitectura en Japón. A menudo se menciona como el rasgo más admirable de su trabajo la concreción de una síntesis entre los postulados de arquitectos modernistas y nociones estéticas propias de su país.
Cabe mencionar que Tange fue ganador en 1987 del prestigiado premio Prtizker, considerado por algunos considerado por algunos como el Nobel de la arquitectura. Hace dos meses, el ganador fue otro japonés: Shigeru Ban. Eso no hace más que confirmar el nivel de la arquitectura japonesa y que el legado de innovación de Tange persiste aún en su país. Algunas obras del arquitecto japonés que merece la pena recordar son las siguientes:
La Catedral de Santa María de Tokio
Fusión de una modernización con elementos tradicionales del Japón. Se acabó de construir en Tokio en 1964 y hasta ahora es uno de los lugares más frecuentados por los creyentes católicos en Japón.
Centro de la Paz de Hiroshima
Se completó en Hiroshima el año de 1956. El éxito que Tange tuvo con este edificio derivó en un reconocimiento por su trabajo por parte de la comunidad de arquitectos a nivel internacional. En 1994 Tange añadió un edificio donde se exponen imágenes de los días posteriores a la explosión terrorífica.
Gimnasio Nacional de Tokio
Para celebrar los Juegos Olímpicos de Verano en Tokio, se decidió levantar este fascinante gimnasio. Al efectuar su diseño, Kenzo Tange se quiso evocar una pagoda japonesa con elementos estructurales occidentales, lo que hace de este edificio otro gran ejemplo de sincretismo, una de las características que marcan la obra de éste arquitecto nipón.
Edificio de Televisión Fuji, Tokio, Japón
Una de las últimas y más interesantes obras de Tange fue el Edificio de Televisión Fuji, ubicado en Tokio. Su inusual estructura es sin duda una de las propuestas arquitectónicas más atrevidas de los últimos años.